Carles Monegal, maestro litógrafo en ROOM ART FAIR #2
Lit Ar Co, blog oficial de ROOM ART FAIR #2
Carles Monegal tiene un pequeño balcón en la habitación 301 que da a la siempre transitada calle de la Montera. Dentro, cuida de sus obras y las de sus compañeros de Quiosc Gallery. Observa, tan agradable.
Es uno de los tres o cuatro maestros litógrafos que quedan en Cataluña y de los pocos que quedan en el país. Su taller de litografía en Tremp, Lleida, es de los pocos que siguen trabajando de forma artesanal la edición a partir de rocas calcáreas puras. Para poder mantener la "auténtica" fotografía ha creado junto a otros compañeros, ya desde hace algunos años, un fondo de suscriptores que sostienen la actividad del taller a través de los 25€ de aporte mensual que se ofrecen a cambio de tres litografías totalmente artesanales. Y es que Carles se queja de la falta de regulación que existe con respecto a su modalidad artística en nuestro país. "Es una lástima que se esté perdiendo esta tradición de maestros litógrafos. Es uno de los pocos países en el mundo en el que este oficio no está regulado. Litos es piedra, por lo tanto algo cuya matriz no sea una piedra está prohibido llamarlo litografía. Aquí muchos utilizan prensas como las del ABC o El País y sacan 4.000 copias a las que llaman litografías y se quedan tan anchos. Eso hace que no podamos mantener los talleres, que somos los que estamos realmente enamorados de esta técnica".
El artista trabaja directamente sobre la piedra, y por un sistema de hidrofília e hidrofobia pues la piedra reacciona a la grasa y el ácido nítrico con los que trabaja el artista para mantener ese dibujo. Puedes entintarlo, ir poniendo papel encima, y con una prensa ir sacando copias. En España está establecido que hasta 75 copias se trata de una pieza artesanal. "Es un proceso laborioso, largo y precioso, porque la piedra es algo vivo que traduce el dibujo del artista. La piedra reinterpreta su dibujo, no lo va a calcar. Su puro, su densidad, el que pase una nube y cambie la humedad del aire, todo eso la piedra lo nota y se plasma en el dibujo. El artista tiene que estar abierto a jugar con la naturaleza".
Es uno de los tres o cuatro maestros litógrafos que quedan en Cataluña y de los pocos que quedan en el país. Su taller de litografía en Tremp, Lleida, es de los pocos que siguen trabajando de forma artesanal la edición a partir de rocas calcáreas puras. Para poder mantener la "auténtica" fotografía ha creado junto a otros compañeros, ya desde hace algunos años, un fondo de suscriptores que sostienen la actividad del taller a través de los 25€ de aporte mensual que se ofrecen a cambio de tres litografías totalmente artesanales. Y es que Carles se queja de la falta de regulación que existe con respecto a su modalidad artística en nuestro país. "Es una lástima que se esté perdiendo esta tradición de maestros litógrafos. Es uno de los pocos países en el mundo en el que este oficio no está regulado. Litos es piedra, por lo tanto algo cuya matriz no sea una piedra está prohibido llamarlo litografía. Aquí muchos utilizan prensas como las del ABC o El País y sacan 4.000 copias a las que llaman litografías y se quedan tan anchos. Eso hace que no podamos mantener los talleres, que somos los que estamos realmente enamorados de esta técnica".
El artista trabaja directamente sobre la piedra, y por un sistema de hidrofília e hidrofobia pues la piedra reacciona a la grasa y el ácido nítrico con los que trabaja el artista para mantener ese dibujo. Puedes entintarlo, ir poniendo papel encima, y con una prensa ir sacando copias. En España está establecido que hasta 75 copias se trata de una pieza artesanal. "Es un proceso laborioso, largo y precioso, porque la piedra es algo vivo que traduce el dibujo del artista. La piedra reinterpreta su dibujo, no lo va a calcar. Su puro, su densidad, el que pase una nube y cambie la humedad del aire, todo eso la piedra lo nota y se plasma en el dibujo. El artista tiene que estar abierto a jugar con la naturaleza".
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