Día de montaje en JUSTMAD

Mañana abre sus puertas JustMad, la más joven de las cuatro ferias de Arte Contemporáneo en las que se citarán profesionales y amateurs de la capital y el mundo entero. En Avenida de America 41, en el impresionante Hotel Silken Puerta de América, diseñado por arquitectos tan renombrados como Norman Foster o Jean Nouvel. La primera planta del parking, también de diseño, alberga los más de 80 expositores, incluidas galerías, escuelas de diseño, editoriales e instituciones que participan en esta jovencísima feria nómada. 

Eran las nueve de la mañana. Un termómetro gigantesco marcaba menos de 5 grados, los coches no avanzaban en Avenida de América y el Sol desaparecía tras las grises Torres Blancas. En la entrada principal del Silken Puerta de América, en un espacio apartado de los Jaguar azul eléctrico y los Porche rojos, cargaban y descargaban furgonetas a un ritmo frenético. Como en una obra, un supermercado o cualquier almacén. Pero las cajas y los paquetes de papel de burbuja contenían Arte. "Frágil". Los operarios transportaban con mimo las cajas. Dentro, un plástico ilimitado protegía el suelo del serrín y las manchas de pintura. Las maderas recién pintadas en blanco de los stands atufan el espacio. Asfixian y hace frío. Hay paquetes, todos marrones, apoyados en la plaza y media que tiene de espacio cada stand. 

Cuando vamos a disfrutar de una feria, pocas personas se paran a pensar cómo se ha montado todo. Es como si siempre hubiese estado allí, tan esporádico, armónico y bien organizado, tan sencillo. Pero lo cierto, y ahora lo sé, mis hombros y mis gemelos lo saben, que conlleva un trabajo agotador. Hay que buscar tijeras. Hay que traer papel pintor. Acércame un lápiz. Tráeme el martillo para clavar estas alcayatas. Pon el nivel. La esquina derecha está demasiado abajo. Este foco no luce. Dile a Elena que faltan tres acreditaciones. Y empiezan a llegar los galeristas y se encierran en sus mundos de 20 metros. Construyen más paredes, pintan y hacen agujeros. Algunos traen acompañantes. Otros vienen solos y necesitan ayuda para descargar el coche. Te piden que subas árboles de más de dos metros pintados en blanco por una escalera de incendios para montar una performance en una habitación que cuesta más de 200 euros la noche. Y entre todos ellos, sigilosos, agradecidos, toscos, soberbios, los artistas, que quedan y pasean, o colocan a su hijo y después desaparecen.

Es un ajetreo y un continuo desconcierto. Hay fallos. Cosas que no se arreglan. Te miran extraño. Te sonríen y quieren conocerte. Mañana llegará el público, que es el que juzga. El que completa la obra. Estaremos de nuevo.

Del 16 al 19 de Febrero de 2012.
De 11.00 a 20.00 horas.
El jueves 16 reservado para profesionales.
Metro: Cartagena (L7) y Av de América (L4, L5, L6 y L9) 

Comentarios

Lo más leído en Litarco

Familia: manual de instrucciones

Wish -books- list para el Día del Libro

Y esa... ¿quién coño es?