El lienzo "La osa hormiguera de Su Majestad" puede ser un Goya.
La obra expuesta en el Museo de Ciencias Naturales "La osa hormiguera de su majestad" ha sido calificada por la Fundación Lázaro Galdiano como un posible Goya.
La obra "La osa hormiguera de Su Majestad" expuesta en el Museo nacional de Ciencias Naturales nunca había acaparado la atención hasta ahora. En el número de junio-julio de la revista Goya de la Fundación Lázaro Galiano, el doctor Javier Jordán de Urríes, especialista en coleccionismo, pintura y escultura del siglo XVIII español, aseguró para sorpresa de muchos que dicho cuadro se trataba de un posible Goya. Al parecer, las similitudes estilísticas entre este cuadro y los paisajes de los cartones para tapicés del pintor aragonés han sido las claves de las pesquisas.
En julio de 1776 el rey Carlos III mandó traer de Buenos Aires una preciosa hembra de oso hormiguero que trasladó al Casón del Buen Retiro. Pidió que se realizara un retrato del animal, y hasta ahora siempre se habría creído que el primer pintor de cámara, Antón Rafael Mengs, era el autor. "Metido en una investigación sobre Mengs y sus discípulos, dejé de fijarme en la osa hormiguera y atendí al paisaje. En ese momento reconocí el estilo de Goya, eso sí con una técnica mucho más cuidada que en los cartones. Al ver el cuadro en el museo lo tuve claro" cuenta Jordán de Urríes en el artículo.
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| "La osa hormiguera de Su Majestad" |
La obra "La osa hormiguera de Su Majestad" expuesta en el Museo nacional de Ciencias Naturales nunca había acaparado la atención hasta ahora. En el número de junio-julio de la revista Goya de la Fundación Lázaro Galiano, el doctor Javier Jordán de Urríes, especialista en coleccionismo, pintura y escultura del siglo XVIII español, aseguró para sorpresa de muchos que dicho cuadro se trataba de un posible Goya. Al parecer, las similitudes estilísticas entre este cuadro y los paisajes de los cartones para tapicés del pintor aragonés han sido las claves de las pesquisas.
En julio de 1776 el rey Carlos III mandó traer de Buenos Aires una preciosa hembra de oso hormiguero que trasladó al Casón del Buen Retiro. Pidió que se realizara un retrato del animal, y hasta ahora siempre se habría creído que el primer pintor de cámara, Antón Rafael Mengs, era el autor. "Metido en una investigación sobre Mengs y sus discípulos, dejé de fijarme en la osa hormiguera y atendí al paisaje. En ese momento reconocí el estilo de Goya, eso sí con una técnica mucho más cuidada que en los cartones. Al ver el cuadro en el museo lo tuve claro" cuenta Jordán de Urríes en el artículo.
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